La Enfermera Púdica...

CHISTES BUENOS

     Al llegar mi turno en la atestada sala de espera del médico, me acerque a la recepcionista, quién sin levantar los ojos de su PC, secamente me dijo:

     —¿Cual es el motivo de su consulta con el doctor?

     —¿La verdad? —pregunté extrañado.

     —Claro que la verdad: este es un consultorio muy serio. —     Respondió la dama ajustándose sus gruesas gafas.

     —Bien señorita; es que tengo un problema con mi miembro viril...

     Los pacientes que esperaban en la sala se rieron, y la recepcionista enojada me recriminó diciendo:

     —Debería ser más prudente, esas cosas no deben decir tan escuetamente...

     —¿Porqué no? Usted me preguntó y yo le respondí.

      —Sí, pero podría haber disfrazado su respuesta diciendo otra cosa, por ejemplo que tenía una irritación en el oído...

     —Bien —dije conforme y agregué—, que tal si borramos lo anterior y empezamos de nuevo, ¿de acuerdo?

     —De acuerdo —respondió ella.

     Yo retrocedí unos metros, luego avance de nuevo hacia ella y dije:

     —Buenos días, señorita.

     La recepcionista se sonrió dulcemente y respondió:
     —Buenos días señor, ¿Cual es el motivo de su consulta con el doctor?
     —Es que tengo problemas con mi oído...
     La recepcionista  sonrió triunfante viendo que había seguido su consejo y preguntó:

     —Y… ¿cual es la dolencia de su oído, señor?”
     —Señorita... ¡¡¡es que me arde mucho al orinar...!!!

La ventaja de ser inteligente es que se puede fingir ser imbécil, mientras que al revés es imposible.

Woody Allen

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